Anciano_Novato

Muchas gracias, Don SuckNickar, por sus gentiles palabras. No creo pueda volver con los mismos bríos de antaño, básicamente por trabajo y tiempo. Pero me comprometo a, si logro visitar a alguna Dama, elevar mi respectivo reporte para aquellos que son nuevos en este ambiente. Un abrazo a tod@s.

Mi estimado Lord: Lamento informaros que no he regresado definitivamente aunque ella se merece reportes que le hagan justicia. Las cosas no han andado bien precisamente, pero hace varias semanas andaba recordando a Mi Diosa Miel y, aprovechando un pseudo respiro, le contacté, coordinamos y me di el maravilloso gusto de volver a verla. Siempre es un muy grato placer poder visitarla. Saludos a todos y un abrazo a usted, Don Lord.

Nombre = MIEL, Mi Dulce y Eterna MIEL; Edad = mayor de edad; 21 años cumplidos y ¿5? de experiencia (jajajaja); Valor = 4 Arturos de visita; Nacionalidad = Dulce y Chilena; Ubicación = Metro Bellas Artes; Lugar = Edificio moderno, acogedor, discreto; Conserje = Sí, y pide carnet y registra la visita; Horario = 14:00 horas; Recepción = Siempre muuy Atenta; imposible no volver. Servicio: Empotamiento = 10.999% empotado; Estatura = 1,65-1,70m aprox. de Belleza Pura y Natural; Contextura = Una Diosa en la tierra, una maravilla; Cara = Hermosa, Simpática, Única; Nivel de Photoshop = Si es que lo hay, nunca lo he notado; Trato = Muy muy atenta, es muy delicada, se dedica 100% a su visitante; Besos = Muchos, Dulces, Maravillosos; Boobies = Hermosas, firmes, turgentes, delicadas; Culito = Descrito ya muchas veces pero, reiterando, su derriere es: Redondito, Palpable, enteramente Besable; Pussy = Siempre muy bien Depilada, Besable, mi obsesión saborearle; Mamón = SIN, cada vez que lo hace tiemblo de sólo pensar en que voy a sucumbir a sus artes; Movimientos Pélvicos = ¡Uf! ¡Qué caderas! ¡un swing asesino si lo quisiese!; Anal = CON RESTRICCIONES, por costo Adicional (¡sólo un afortunado por día!); Ambiente = Departamento demasiado Confortable, siempre ordenado, muy pulcro en todo el sentido de la palabra; Atención = Es, definitivamente, Mi Personal Diosa del Amor. Volverías = Mientras tenga vida y pueda le seguiré visitando. Es mi adictivo placer culpable. Experiencia: Buenas noches, estimados contertulios. Pido disculpas por haber desaparecido tanto tiempo de estas especiales páginas. Los avatares de la vida me obligaron a ausentarme tanto de vuestras historias y comentarios como de ellas, las Reinas, aunque hoy les vengo a relatar someramente el maravilloso y ansiado reencuentro con mi querida Diosa. Mucho tiempo hube de permanecer en el anonimato y en la obscuridad total dado los bruscos cambios laborales que tuve que sufrir a manos de arpías y arteras jefaturas. Producto de ello tuve que drásticamente dejar de participar en los sorteos y, peor aún, dejar de visitar a Mi Diosa. Pero no hay mal que dure cien años (ni pelotudo que los aguante... perdón lo soez) y, con muchos tiras y aflojas, logré coordinar una visita a la más hermosa Diosa que he tenido el privilegio de conocer: MIEL. Coordinada la visita un viernes por la mañana, me sentí todo aquel día como quinceañero a la espera que llegase el día de mi gran cita (sábado después de mediodía). La mañana la gasté buscando algún pequeño “engañito” que ofrendarle en mi regreso a sus cálidos y tiernos brazos. Ya cerca de la hora le contacto para informarle que ya me encontraba frente a su dirección. Me responde que por favor le espere diez minutos, minúsculo tiempo que me pareció toda una eternidad. Cumplido el plazo accedo al control de identidad de rigor, soy autorizado a subir al mismo cielo y me interno en aquel laberinto de cemento y fierros. Marco el número del celestial piso en el tablero del ascensor y éste asciende, lentamente, como si supiera que quiero pronto llegar a los brazos de mi Amada Diosa y se detiene una y otra vez en su recorrido. Finalmente, luego de varias detenciones sin explicación alguna (se detuvo en algunos pisos sin haber personas esperándolo... ) accedo a aquel nivel. Camino lentamente hacia su puerta. A cada paso mi corazón más se aceleraba. Llego ante aquel cancerbero de madera, pulso el timbre, retrocedo, espero... espero... siento sus característicos pasos y mi corazón se desbocó. Se abrió la puerta permitiéndome observar su vacío interior. Ingreso, dejo las nimiedades que llevaba de ofrenda sobre aquella mesa, volteo casi lentamente mientras siento aquel “clack” de la cerradura al bloquearse y... allí... tras de mí... estaba ELLA, sonriente, iluminada, sus fulgurantes ojos me sonreían y su carmesí boca pronunció las más hermosas notas de su celestial lira: “bienvenido, Mi Viejito Latero...”. Nos abalanzamos el uno al otro y nos confundimos en un apretado abrazo fusionándonos en un cálido y sincero beso, tan añorado, tan deseado por este mortal y ya abyecto vejestorio. Volví a inhalar aquel tan particular aroma de su piel, volví a palpar aquel satín que cubre toda su existencia, volví a perderme en aquellos profundos y expresivos ojos, volví a verle sonreírme tan dulcemente que había olvidado lo sublime que era estar frente a ella hipnotizado y embelesado por su bella magnificencia. Dejamos de besarnos, intercambiamos las típicas preguntas de rigor, toma suavemente mi mano y me guía a su aposento. Iba a indicarme ejecutara el típico y ya acostumbrado ritual cuando dejé mis cosas al pie de su cama e ingresé inmediatamente al cuarto de baño para proceder con mi aseo personal. Regreso a la habitación y allí estaba Ella, sonriente, esperándome tendida sobre la cama. Su sola presencia iluminaba la habitación obscurecida por las gruesas cortinas que pendían de la barra sobre el gran ventanal. Silenció su teléfono y lo dejó sobre la mesita de noche. Me acerco y me tiendo a su lado suavemente. No quería importunar la armonía de su figura. Conversamos un poco poniéndonos al día respecto de lo que había sucedido en el intertanto con nosotros. Conversación grata, miradas cómplices, ambiente incitante, todo ameno... hasta que nos besamos y nuestra pasión se desató: nos fundimos en un profundo beso, nuestras lenguas jugueteaban en la boca del otro, se acariciaban, se reconocían, se retorcían en una seductora danza de conquista mutua. Mientras, nuestras manos recorrían nuestros cuerpos, descubriendo en el otro rincones que nos eran seductores y brindándonos caricias de afecto y de pasión. Mi mano acariciaba sus mejillas, su cabello, mientras la otra desbloqueaba aquellos broches de su brassiere, liberando esos únicos y maravillosos pechos. Suavemente, con cariño y con mucho morbo recorría aquella satinada y maravillosa piel, mientras sus manos acariciaban mi espalda. Mi mano fue por aquella última prenda. Lo descorrí suavemente sobre sus firmes y redondas nalgas, colaborándome ella alzando sus torneadas piernas para, finalmente, retirar su colaless de su cuerpo. Desnudos ambos, seguimos abrazados besándonos. Nuestros besos nos los entregábamos como si el mundo se fuese a terminar y se nos fuera la vida en ello. Cada caricia quemaba nuestra piel. Cada nuevo beso nos encendía aún más. Besé y acaricié sus pechos, tersos, suaves, candentes, sensibles. Descendí por su plano vientre de fuego. Ascendí a aquel maravilloso Monte de Venus, el que coroné con sendos besos. Abrió tierna y delicadamente sus muslos permitiendo zambullirme en aquella maravillosa flor, a la que ofrendé mis más dedicados besos y cuyos labios de pétalos fueron recorridos y acariciados por mi sedienta lengua, logrando libar su néctar que manaba profusamente dado el extenso preámbulo. Luego Miel me tiende de espalda y es ella quien ahora desciende abalanzándose sobre mi indigno amigo de cien batallas. Lo besa. Lo acaricia. Lo recorre en toda su enhiesta extensión. Besa mis gónadas. Siento que pronto explotaré. Mágica y delicadamente Miel coloca el disfraz a mi amiguito sin dejar de besarlo, regresando por mi pecho hacia mi agitado rostro. Me besa. Nos volvemos a besar mientras me monta sobr mis caderas descendiendo las suyas sobre mi ya enfundado amigo y lo hace tan delicadamente que suavemente me hizo entrar en ella, cálida, húmeda y profundamente, comenzando un suave y delicioso vaivén sin jamás interrumpir nuestro beso. Los embates poco a poco fueron haciéndose más y más intensos hasta que el desenfreno hizo presa de nosotros y, en un arrebato de gozo, giramos sobre nuestros abrazados cuerpos quedando Miel bajo mi peso y continuamos en aquel cadencioso movimiento hasta que me hizo vivir aquel mítico Big Bang celestial bajo su embrujo, lo que provocó le abrazara y la atrajera hacia mí brindándonos un jadeante beso final. Dios, había olvidado lo maravilloso que se siente y se viven estos instantes al lado de Miel. Luego de unos minutos se desmonta suavemente, busca toallitas húmedas, retira el preservativo de mi ya exiguo amiguito y lo asea con cariño, con delicadeza, dejándome inerte sobre su cama. Regresa, se tiende a mi lado, le abrazo, beso su frente, sus mejillas, agradecido, me yergo para ir a la ducha una vez más y me indica que aún me quedan minutos. Confirmo en mi reloj así es pero le respondí “mejor, lo prefiero. Así te tomas estos pocos minutos para descansar y relajarte un poco”. Sonríe. Al salir de la ducha aún está tendida en su cama respondiendo mensajes. Me inclino y le beso una vez más su boca, su frente, sus mejillas. Se levanta, me acompaña tras la puerta, nos volvemos a besar una vez más despidiéndonos pensando en que quizás por cuánto tiempo más tendré que ausentarme y negarme disfrutar de su celestial compañía, sus afectos y cariños tan divinamente brindados. Salgo a la calle. La gente circula acelerada, como siempre, los autos ahogan sus quejas en bocinazos frenéticos contra un ciclista... pero yo... yo camino cual desmemoriado sin saber en qué rumbo dirige sus pasos, pensando en ella, en Mi Dulce Diosa que me ha brindado, una vez más, un maravilloso y esperado reencuentro. Buenas noches.

Re: oscuro887 vs Miel, Rifa578 Maese Oscuro887, no se imagina usted cuánto le envidio su visita a Mi Dulce MIEL. Es una Señorita que se hace querer por lo integral que es ella: temas de conversación y sabe lo que hace. Le felicito y, lo mejor de todo, ratifica la excelentísima atención que nos brinda en cada visita.

Re: Rifa 564: CATALINA, el Ángel de mis Sueños Gracias por sus palabras, Sir Gesantio. Imagino que ya conoció a Lady Catalina: una preciosura de Señorita.

Tabla de Reportes Nombre = CATALINA Edad = 21 años cumplidos; suficiente para mí; Valor = 4 Arturos; (cobro de Rifa en mi caso); Nacionalidad = Campeona Copa América; Ubicación = Metro Univ. Católica; Lugar = Departamento compartido pero muy piola; Conserje = Sin Conserje pero seguro edificio; Horario = 11:30 hrs.; Recepción = Siempre Cariñosa, Muy Atenta; Servicio: Empotamiento = 80%, de ella desde antes... Estatura = 1,60m aprox, justo para que me mire hacia arriba con esos ojazos... Contextura = Delgada, Rica... Cara = Es Hermosa, esa sonrisa gentil que tiene es encantadora... Nivel de Photoshop = 0% de retoque, es sólo ella... Trato = Amorosa, Atenta... Besos = De Polola, Suaves pero muy ricos... Boobies = Medianas, Hermosas, un Pezoncito sensible Di-vi-no... Culito = Redondito, Hermoso, Bellas Caderas... Pussy = Sin Aroma alguno, Bien Rasurada... Mamón = Sin Forrito, Delicada, Con Cariño... Movimientos Pelvicos = Lentitos, Suaves, Maravillosa... Anal = Por Adicional pero me embelesa tanto que no se lo he pedido... Ambiente = Ordenado, Limpio, Tranquilo... Atención = Relajadísima... Volverías = Sí, todo el tiempo si pudiera... Relato... Gentilmente recibo un mensaje de Lord indicándome que había sido el ganador de una rifa y que dentro de las opciones estaba la linda Catalina. Ni tonto ni perezoso la elegí... contacto con la agencia, solicito visita por dos horas, me autorizan y programo. Llegado el día elegido paso a buscar un par de pequeños presentes, confirmo mi llegada al sector y me autorizan el ingreso. Subo aquellas agotadoras escaleras (¡soy viejito! ¿ya?), pulso el timbre y casi al instante se abre el portal al cielo. Tras la hoja aparece Ella, el Ángel de mis Sueños, hermosa, sonriente. Nos saludamos con un piquito, me lleva a la habitación, le entrego aquellos engañitos prometidos, los recibe, me observa y me hace notar mi cambio de look... ¡reímos! Qué buena observadora es ella... ¡y qué memoria que tiene! Paso a la consabida ducha, regreso luego a la habitación y ella ingresa tras de mí. Nos tendemos en la cama mirándonos de frente. Conversamos un poco poniéndonos al día del tiempo de ausencia mutua hasta que un silencio nos hizo mirarnos a los ojos y nos dimos un piquito, y luego otro, y otro, y muchos más. Cerramos nuestros ojos y nos entregamos a vivir y disfrutar las sensaciones de aquellos púberes pero no menos motivantes besos. Mi mano recorre su espalda. Libero sus pechos de aquel brassiere y los beso sutil y delicadamente. Un suspiro me indicó el agrado provocado. Sus pezones se erectaron a la calidez de mi atención. Alterno mis besos entre una y otra mientras mi mano recorría sus caderas y acariciaba sus nalgas, su vientre. La coloco de espalda sin dejar de besar su pecho y desciendo recorriendo con mi boca su vientre de fuego. Antes de llegar a su Monte de Venus mordisqueo su bajo vientre y Ella, instintivamente, alza levemente sus caderas en clara señal que le era agradable mi presencia y accionar. Continúo descendiendo y ahora mordisqueo sus muslos, los cuales se abrieron para permitirme recorrerlos a piacere hasta el inicio de su nalga. Alcanzo sus labios mayores, los lambo, los beso sutilmente, luego los labios menores hasta que sin aviso previo hundo mi profanadora lengua en su cálida y ya húmeda intimidad. Su quejido me indicó que Catalina disfrutaba mi incursión. Cambio mi posición y me instalo de frente a Ella entre sus piernas, entregándole "la mirada del cocodrilo", abocándome de lleno a brindarle placer con mi lengua, hundiéndola en su vagina y recorriendo toda su vulva, húmeda, cálida, maravillosamente adictiva. Una vez logrado mi objetivo, subo a su lado. Nuevos tiernos piquitos, nuevos abrazos, su mano alcanza mi indignidad y me acaricia. Más piquitos. Le pido el disfraz de rigor. Magistralmente mi minion es disfrazado. Catalina alza su pierna y me monta a horcajadas sobre mis caderas, descendiendo controladamente sobre mí mientras su mano guiaba mi apéndice hacia su celestial gloria. Lentamente me hizo entrar en Ella. Cuando estaba completamente en su interior, inclina su tronco hacia mí, nos besamos y alcanzo sus oscilantes pechos los que vuelvo a besar alternadamente mientras mis manos aferradas a sus nalgas le ayudaban en aquella embrujante cabalgata. Luego de un par de minutos Catalina me sugiere cambio de posición y, recordándola, le pido la mítica "Doggy Style". Se coloca en posición mientras me ubico tras de Ella. Con mi mano guío hacia su vagina mi órgano, entro una vez más y comienza mi desenfreno, mientras mis ojos devoraban la visión de aquella sinuosa y arqueada espalda y sus hermosas caderas golpeando las mías. Mis manos acariciaban su espalda, se aferraban a sus nalgas, volvían a sus hombros, recorría sus costados, marcaba su delgada cintura y volvía a aferrarme a sus caderas hasta que mi final fue más que inminente. Comprimiéndola contra mí, como si quisiera fundirme dentro de ella, siento que mi simiente se derrama explosivamente en aquel disfraz. Temblores se apoderan de mi cuerpo, mi agitado corazón palpita a mil y su quejido final me dice que a mi Bella Catalina algo le he provocado. Alcanza las toallitas húmedas, retiro el preservativo, me asea, se tiende tierna a mi lado, nos abrazamos, nos besamos, reposamos... luego de un rato, volvemos a besarnos tierna, delicadamente, e iniciamos la segunda hora. Si bien es cierto fue muy similar, fue más frenética, fue más íntima, fue más deliciosa, esa segunda hora la guardaré para mis recuerdos y embelesamiento pues, definitivamente, Catalina es el Ángel de mis Sueños. Buenas tardes. Anciano Novato Catalina, Comentarios

Re: LOLITA, Una Dulce y Apasionada Sorpresa. :fome: Jooojojojojo... ¿reporte? ¿Habrá reporte, Don PiolaCalifa que sustente su aseveración? Digo, en favor de los demás foreros y, por qué no, en favor de la Señorita LOLITA también...

Re: LOLITA, Una Dulce y Apasionada Sorpresa. Don PiolaCalifa: No se quede con el "se ve..." ¡Pálpela! ¡Visítela! ¡Desmiéntame! Pero no se quede con el "se ve..."

Tabla de Reportes Nombre = KATA; Edad = 20 años cumplidos; Valor = Cobro Rifa 551 (4 Arturos de paisa); Nacionalidad = Chilenísima de tomo ¡y qué lomo!; Ubicación = Metro UdeCh; Lugar = Depto. Propio, Compartido con Amiguita; Conserje = Sí, hay conserje... registra el ingreso... mejor así... Horario = hora de almuerzo (un maravilloso postre); Recepción = Muy Amorosa, Simpática, Atenta; Servicio: Empotamiento = 70% Empotado; me fas-ci-nó; Estatura = 1,55-1,60m al ojímetro Contextura = Delgada, Linda Figura, Rico lo Suyo; Cara = Hermosa, Simpática Nivel de Photoshop = 0% de retoque, Naturalmente Ella; Trato = Muy Amoroso, Atenta, Simpática, Conversadora si se da esa química; Besos = De Polola y Amante: suaves al inicio, con pasión después; Boobies = Fascinantes y sensibles, Hermosa Forma y Tamaño; Culito = Redondito, Paradito, Rico, para morderlo... Pussy = Sin olores, Rasurada, un Manjarsh... Mamón = Sin Forrito, Garganta Profunda, Dedicada... Movimientos Pélvicos = Exquisitos Movimientos, muy buenas caderas... Anal = Negativo; Ambiente = Ordenado, limpio, fresco... Atención = Muy Relajada, 100% dedicada a su visitante... Volverías = ¡TODO EL RAAATO! Relato... Participo en esta rifa donde ella era una de las opciones: KATA una chica jovial, simpática, con sus temas muy claros para su edad, lo que me dejó gratamente sorprendido. Una vez coordinada la visita, enfrento el trámite del conserje: me registra en su libro de intrusos ("novedades"), me anuncia, soy autorizado e ingreso. Ascensor, piso, busco apartamento, pulso timbre, tacones, se abre la puerta, ingreso y tras esa hoja el paraíso: un ángel sonriente me observa al voltearme. Me sorprende la simpatía que irradia. Como si la conociera de mucho tiempo. Besito de bienvenida. Le entrego un pequeño obsequio que compré previamente y me hace pasar a la habitación: dormitorio en suite, cama amplia y ordenada, ambiente fresco, música suave y un ventilador moviendo el aire. Me consulta si deseo ducharme y le respondo que es un trámite necesario y obligatorio. Sonríe ante mi parsimonia, me entrega una toalla limpia y doblada, me indica el baño y me deja solo. Ducha fresca, agradable y bien exigente el aseo: Ella lo ameritaba. Salgo enfundado en la toalla y me tiendo en la cama. KATA se sienta a mi lado con sus manitas y cara apoyadas en mi abultado vientre, observándonos. Conversamos de nuestras vidas, de mi trabajo, de lo estressado que me siento y alaba mis logros en la vida. Me sorprende su optimismo y me brinda un beso. Me retira la húmeda toalla dejando mi vergüenza expuesta. Vuelve a adoptar la posición inicial, seguimos conversando otro poco. En una pausa nos quedamos mirando. La atraigo hacia mí y nos besamos para nunca más soltarnos. Se tiende sobre mi cuerpo y la abrazo. Continuamos besándonos largamente mientras mis manos recorrían su hermosa humanidad por sobre el negligé negro que lucía, especialmente aquellas lindas y redondas nalgas. Nos seguíamos besando e inicio el despeje de su piel retirando su prenda, a lo que ella, gentilmente, coopera levantándose y retirándola de su cuerpo, exhibiendo su cintura y sus bellas boobies, las que sin decir "agua va" me acerco a ellas y las colmo de besos, los que KATA agradece con sentidos suspiros. Ya desnuda, se tiende nuevamente sobre mí y continuamos en aquellos besos, ahora más profundos y apasionados, recorriendo toda su extensa espalda y sus glúteos maravillosos. Ya habiendo alcanzado con suaves caricias su dulce ojete, sin soltarnos de aquel eterno beso rodamos sobre la cama dejándola a ella bajo mi cuerpo e iniciando mi descenso por aquella piel de fuego. Vuelvo a besar aquellos maravillosos pechos con dedicación lo que provoca en ella suaves y profundos suspiros. Tristemente me desprendo de ellos y, recorriendo su vientre, alcanzo el Shangri-la entre sus piernas. Mordisqueo sus muslos, su Monte de Venus, suavemente sus labios mayores y estampo un beso en sus labios menores lo que provoca un suspiro tal que su espalda se arquea y sus piernas se abren más a mí. Comprendiendo aquel intrínseco mensaje, me dedico a absorber y libar su miel, su elixir de vida desde su intimidad, lambiendo y besándola en toda su extensión, con cada vez más dedicación hasta que obtengo mi ansiado premio. Sin mediar tiempo, me toma de mi cráneo y me lleva a ella para continuar besándonos. Mi órgano peligrosamente ubicado y nosotros desatados en la pasión de aquel beso, extiende su mano y lo toma firmemente. Con la otra mano alcanza el detestado y necesario sobre, extrae su contenido, me hace rodar en la cama, lo coloca en un solo paso, cruza su pierna sobre mis caderas montándome a horcajadas, lo guía hacia su mojada entrada vaginal, lo siente "en posición" e inicia un lento y controlado descenso sobre mí, disfrutando cada centímetro de mi indigno apéndice pero que ella, gentilmente, después alabó (¡y dejó mi ego más arriba de las nubes!). Ya abducida, perdida mi verga en su cálido interior, lo aprieta, lo percibe, lo disfruta e inicia un vaivén de sus caderas maravilloso, con desenfreno, con pasión desatada, sin control nos embestíamos, casi con furia, se inclina sobre mí y en aquel desenfreno volvimos a besarnos y a continuar cabalgándonos. En un momento se detiene, se sienta erguida en su montura, adelanta sus pies y levanta sus caderas, inclina su visión y observa cómo mi apéndice entra en ella una y otra vez provocándole tal morbo que aumentó nuestra fricción y expresiones de gozo mutuas. Me pide le avise cuando sienta que se acerca mi orgasmo pues quiere recibirme todo en su boca. Con esa sugerencia en mi oído, acelero nuestro ritmo y le advierto entre quejidos guturales que siento me acerco a mi clímax. Se desmonta, retira el traje de hule e inicia un profundo beso a mi sexo, regalándome aquella dulce mirada del cocodrilo. Le pido un "69" final, para lo cual se acomoda sin liberar mi alabado minion. Ya ambos en posición, nos brindamos placer oral mutuamente, tan profundo y desatado de nuestra parte que nos arrancamos un profundo orgasmo donde KATA recibió toda mi simiente y donde yo volví a recibir su miel. Luego de una pausa y de una dedicada y delicada limpieza de su parte a mi órgano, se tiende a mi lado, ambos exhaustos, abrazados al otro. En mi caso, demasiado agradecido por la experiencia. Mato el momento (se ha hecho mi costumbre) preguntando si estaremos en tiempo. Se estira, observa su celular y su rostro lo dice todo. Me yergo, tomo la toalla y me ducho rápidamente: se viene otra cita para la otra Señorita. Me visto. Salgo y KATA me acompaña a la puerta. Le doy un último agradecido beso y desciendo del edificio a la calle atestada de ruido, pero imperceptible para mí. Sólo iba pensando en KATA, una Chica Sorprendentemente Maravillosa. Buenas tardes. Anciano Novato "La EstoCada" Kata, Comentarios http://www.laestocada.cl/upload_files/utilidades/chicas/1914/1914_1.jpg

Re: LOLITA, Una Dulce y Apasionada Sorpresa. Pero Lord, no me sirve que usted me advierta... ¡TENGO QUE VIVIRLO, EXPERIMENTARLO! ...y como soy wn me empoto... en todo caso, ¡vale la pena repetirlo!

Nombre = LOLITA; Edad = 21 años cumplidos; Valor = 4 Arturos; Nacionalidad = Dulcemente Chilenísima; Ubicación = Sector Residencial de Providencia; Lugar = Edificio moderno y acogedor; Conserje = Sí (aunque pasé piola); Horario = 11:00 horas; Recepción = Muuuy Atenta. Grata recepción; Servicio: Empotamiento = 75% para ser 1era. vez; Estatura = 1,65-1,70m aprox.; Contextura = Delgada pero bien apretadita; Cara = Muy Bonita; Nivel de Photoshop = Quizás algún detallito menor, pero claramente es ELLA; Trato = Cautivadoramente Simpática y Agradable; Besos = Sabrosos, profundos y motivadores; Boobies = Hermosas, Dulcemente Pequeñas pero muuuuy Sensibles; Culito = Hermoso, Redondito, Acariciable, Besable y más; Pussy = Perfectamente Rasurada, Sin Nada Raro, Devorable; Mamón = CON; si bien es cierto es punto en contra es SU norma, sabe muy bien lo que hace y ¡CÓMO LO HACE!; Movimientos Pélvicos = ¡Uf! Literalmente una Batidora, de menos a más; Anal = Por Valor Adicional (¡y sólo uno diario y dependiendo del tamaño del solicitante!); Ambiente = Departamento Muuuy Confortable y Grato; Atención = Es una Encantadora Señorita. Volverías = ¡Obviamente! La seguiré visitando... ¡me fascinó! Experiencia: Habiendo revisado el portal, se me cruza entre ceja y ceja esta Señorita: LOLITA. Se alinearon los astros y logramos concretar cita para este miércoles a primera hora. De sólo imaginármela no negaré que me sobaba mis manitas. Llegado el día y la hora, paso a comprarle un pequeño engañito, un detallito, y me dirijo a su locación. LOLITA ya me esperaba. Ingreso al edificio, conserje me ausculta visualmente e imagina no revisto peligro alguno para el edificio así que me permite el acceso con un mutuo y gentil "buen día". Enfrento el ascensor, marco el piso del séptimo cielo, hasta que después de varias paradas obligadas llego al deseado nivel. Me asomo al pasillo, observo con detención en qué dirección he de marchar y decido correctamente. Llego frente a su puerta y ya mi cuchara estaba a mil... Pulso el timbre, se sienten sus pasos, se abre la hoja permitiéndome el acceso al Departamento, ingreso, volteo y la veo: delgada, sonriente, luminosa, de gafas, enfundada en hermosa ropa interior y cubriéndola una bata de seda negra. Beso, un "¡Hola! ¿Cómo estás?" e ingresamos al hermoso recinto muy bien distribuido. Le entrego a LOLITA mis humildes presentes. Los recibe, los guarda agradecida y me guía al lecho indicándome me siente a conversar un poco. Sin embargo le pido me permita darme una ducha primero dado todo lo que tuve que correr para llegar a una hora relativamente decente a mi cita. Me cede una alba toalla doblada, con aroma a frescura, limpia, y me indica el baño. Me doy la obligada ducha con un buen aseo, aunque ya me había duchado en casa, el sólo hecho de correr para poder llegar a ella hizo transpirara y, por tanto, ameritaba aquella revitalizante ducha. Regreso a la habitación enfundado en aquella toalla exhibiendo descaradamente lo más prominente de mi humanidad: mi vientre. LOLITA, mientras, estaba tendida sobre la cama revisando mensajes en su celular. Al verme aparecer lo deja en modo "Silencio" y queda éste sobre su velador. Me invita gentilmente a tenderme a su lado. Conversamos de nuestras vidas, de nuestros trabajos, de lo tenso que ella me percibía y, sin decir "agua va", me monta a horcajadas sobre mis piernas retirándome la toalla y yo sintiendo en mis pantorrillas sus cálidos y firmes glúteos. Mientras continuábamos en la conversación, me brindó un no menos reconfortante masaje, suave, relajante, muy agradable así como la conversación que sosteníamos. Al terminar ella de brindarme esta atención, me pide me voltee. Alcanza desde su velador el típico sobre metalizado, extrae su ya conocido contenido y, con su propia boca, coloca aquel disfraz traslúcido en mi órgano que, al tenor de sus besos y dedicación, cada vez más se fue convirtiendo en piedra. Me entregué a ojos cerrados a las sensaciones que me brindaba con cada beso, lengüetazo y caricia que le brindaba a mi nunca bien ponderado minion. Después de varios minutos en aquellos menesteres, abro mis ojos y le observo brindándome placer. Le sugiero nos diéramos esos mismos cariños mutuamente. Sonríe, se voltea, yo aún tendido ella distribuye su hermosa humanidad sobre mí, dejando al alcance de mi boca aquel panal de dulce elixir que, al tenerlo frente a mí, inicié un recorrido local para luego dedicarme a su clítoris. Acomodé una de las almohadas bajo mi cabeza quedando con mi boca mucho más cerca de su cálida y húmeda vulva, por lo que besé, lambeé y libé aquel elixir de dioses desde aquella gruta de vida con fruición y dedicación obsesa. Sus estertores en aquellas cimbreantes caderas me indicaron que había obtenido el ansiado premio y, dado que LOLITA continuaba afanada con mi verga, continué drenando aquel manantial hasta que nos agotamos y, ella volteándose sobre mí, con una de sus manos, guía mi abyecto apéndice hacia su intimidad. Una vez correctamente colocado, decide descender sobre mí suave, lentamente, dejándose caer lenta y repetidamente hasta alcanzar un ritmo embriagador. Aferrado a sus nalgas con ambas manos, buscaba besar sus boobies que se bamboleaban frente a mis ojos. Capturada una y luego la otra, LOLITA me consulta "¿te gusta mirar?", respondiéndole afirmativamente. Entonces ella cambia la posición de sus piernas y nuestros cuerpos se separan permitiéndome apreciar como en cada embate mi indignidad entraba y salía de su vulva. Percibiendo su agotamiento en su esfuerzo, le sugiero cambiemos posición a la típica "Doggy Style". Lentamente me libera de su dulce prisión, se acomoda sobre la cama mientras me yergo y ubico tras ella. ¡Qué maravillosa vista! Ya tras ella, ubico mi órgano en su intimidad, vuelvo a entrar suavemente e inicio mi ya típico vaivén observando y disfrutando aquella vista de su ya sudorosa pero sinuosa y hermosa espalda. Deja caer su cara sobre la cubrecama adoptando una mejor posición mientras mis manos se aferraron cual ave de rapiña a sus nalgas y le guiaba en mis embates cada vez más intensos. LOLITA gemía, yo jadeaba, hasta que me fue inevitable contener aquella explosión de estrellas y sensaciones maravillosas volcando dentro del traje de hule mi simiente. Unos últimos embates, un par de jadeos más y mis garras en ristre recorrieron su suave y mojada espalda varias veces, caigo rendido sobre ella brindándole besos agradecidos a sus hombros, su cuello, sus mejillas y finalmente su boca. Lenta y cuidadosamente me retiro de ella. LOLITA, presta, alcanza toallitas húmedas, retira el traje de buzo de mi ahora más indigno y triste apéndice, me limpia diestramente y dispone certeramente de aquel "material peligroso". Luego de este pequeño pero necesario proceso se tiende junto a mí, brindándonos nuevas y agradecidas caricias, más besos e intercambiando palabras hilando una nueva conversación. Luego de un breve lapso, le consulto si estaremos "en tiempo". Observa su olvidado celular y me muestra la hora que éste registra: quedaba un minuto. Le beso profundamente una vez más, me despido de sus hermosas boobies y de aquel dulce manantial de placer. Levanto la toalla y marcho a la ducha. Regreso a la habitación vestido y perfumado. Le vuelvo a besar para despedirme y me dice "te acompaño a la puerta...". Se yergue, camina frente a mí mostrándome, una vez más, sus maravillosas redondeces de su baja espalda. Antes de abrir la puerta nos besamos una vez más. Le expreso un muy sincero "muchas gracias". Se esconde tras la hoja de la puerta y salgo de aquel paraíso. Subo al ascensor. Al salir a aquel ensordecedor bullicio de la gris ciudad recuerdo, sonrío, y agradezco una vez más el haber conocido a LOLITA, una Dulce y Apasionada Sorpresa. Buenas noches. Anciano Novato La EstoCada Lolita, Comentarios http://www.laestocada.cl/upload_files/utilidades/chicas/2526/2526_3.jpg

Datos generales: Nombre= "CARLITA" Edad= 21 añitos cumplidos... Internet= La EstoCada... Costo= ¡COBRO RIFA...! Nacionalidad= Chilenísima Ubicación= Stgo. Centro... Lugar= Departamento tranquilo, confortable... Tipo= comparte con amiguitas... Conserje= Control Obligado... Fono= el publicado... Horarios= el mejor relajo: después de la pega... Comunicación= por WhatsApp, siempre Gentil... Notas servicio: Nivel de Empotamiento= es más Peligrosa hoy... Estatura= 1,60 aprox... Contextura= 7,0; es Hermosa, Simpática, muy Delicada, Cautivante... Cara= 7,0; Bella, con unos Labios sabrosos, Risueña... Nivel de Photoshop= 0%, es ella, tal cual... Trato= 7,0; muy Simpática, sabe a lo que uno va y lo entrega... Besos= 7,0; hermosos y carnosos labios, besadora... Tetas= 7,0; Soy sincero: son 2.0; pero le quedaron muy hermosas, nada exagerado; ¡una maravilla! Trasero= 7,0; siempre Hermoso, Redondito... Flor= 7+++; Bien Rasurada, una Delicia besarla... Mamón= 6,0; CON forrito, muy bueno... ("SIN" es con cargo adicional y depende mucho de la higiene del visitante)... Movimientos Pélvicos= 7,0; Un suave vaivén que te transporta al infinito y más allá... Calidad de sonido= 6,0; suaves gemidos, muy reales... Anal= No he preguntado... Ambiente= 7,0; lugar grato, limpio, acogedor... Atención= 7,0; Siempre Dedicada a su Visitante. Eso se agradece siempre... Relación precio calidad= 7,0; un valor más que justo... Comentario aparte: Luego de una ausencia de las pistas de esta Morena Diosa, se lanza una nueva rifa, participo y soy notificado que he sido el elegido por la Diosa Fortuna para volver a visitarla. Dada la respectiva autorización coordino directamente con CARLITA, horario ajustado para ambos, conserje, autorización, subo al Olimpo, pulso timbre y me recibe ella: más hermosa que nunca esta bella Dulcinea. Besito en los labios de saludo y se sonríe... ¡obvio! Como lleva su boquita pintada, con nuestro beso me ha dejado pintado nuevamente (las veces anteriores que le he visitado ha ocurrido exactamente lo mismo) pero ¡¿qué importa?! Lo que importa es el tiempo que ella brinda a su visitante y la sonrisa con la que me recibe. Entrego un par de nimiedades que me acordé de llevar, pasamos a su nueva habitación, nada más cierra la puerta de ésta y... ¡nos abrazamos! Ella es tan tierna... Luego de un par de besitos, otras risas de su parte por pintarme más... jejejeje... me observa y me pregunta "¿ducha?", a lo que respondo "con este calor sofocante de la ciudad es más que necesario, Hermosa". Saca toalla limpia y perfectamente doblada. Ingreso al recinto, ducha bien prolija aunque rápida, regreso a la habitación y ella está tendida sobre la cama. Me siento a su lado y ella se endereza para quedar sentada junto a mí. Conversamos un poco, de mi trabajo, de lo aburrido que me tiene éste, nos volvemos a besar y el desenfreno no se pudo controlar. En pleno beso caemos a la cama. Para poder acariciar y recorrer una vez más esa maravillosa espalda y acariciar sus hermosas nalgas, la llevo sobre mí y mis manos desabrocharon su brassiere. Interrumpe el beso para retirar la prenda de entre nosotros y continúa besándome. Nuestras lenguas recorrían la boca del otro sin tapujos, se estorbaban, se retorcían cuál boa sobre la otra jugando un excitante y provocador juego. Mis manos recorrían su espalda, mis pulgares rozaban esas nuevas maravillas y pensaba "¡increíble lo naturales que están!". Subía por aquella sinuosa columna, acariciaba sus cabellos, bajaba rozando sus boobies y llegaba a sus hermosas y turgentes nalgas: bellas, suaves, ávidas de cariños. Le acariciaba sus mofletes y apretaba sus caderas contra las mías. Volvía a abrazarla en aquel interminable beso hasta que decido dar un vuelco a la situación. Sin dejar de besarnos, vuelvo a provocar un rodar en la cama, dejando a la Dulce y más Hermosa Carlita bajo mi cuerpo. Termino el beso y desciendo por sus mejillas a su cuello y de ahí a su pecho. "Próxima parada: colonización de aquellas dulces boobies". Tomo mi tiempo. Inicio aquel recorrido desde el inicio de cada una besando, lambiendo y mordisqueando suavemente toda su nueva extensión. Toda su piel suave, tersa, cálida, receptiva y sensible. Fue un deleite el recorrerlas. Llego a sus ya conocidos pezones. Sensibles. Mi lengua jugó un instante con ellos haciendo que mi Bella Dama dejara escapar unos pequeños suspiros de placer, señal inequívoca que se había entregado a las artes de este humilde vejestorio. Ya saciada mi vil curiosidad y satisfecho del resultado de mi inspección, me dirigí a cobrar mi premio: beber de aquel dulce elixir de la vida que siempre me ha brindado Carlita. Sabedora ella de mi nuevo destino en el recorrido a su cuerpo, separa sus piernas mientras descendía besando su vientre permitiéndome observar cómo palpitaban de deseo aquellos húmedos labios. Sin mucho preámbulo besé y succioné aquella maravillosa intimidad una vez más, dedicándome con delicadeza a recorrer cada centímetro de su vulva, incluyendo su perineo y su anillo anal. Ocasionalmente observaba desde aquella posición a Carlita y ella, con sus ojos cerrados, con una mano acariciaba su milagro médico mientras que con la otra acariciaba mi alba cabeza como respondiendo afirmativa y tácitamente a mi silente pregunta "¿lo hago bien?". Luego de obtenido mi premio señalado por sus muslos contra mis oídos y su alzamiento de caderas, subo a besar su boca una vez más. Le abrazo siempre agradecido de aquel regalo que nunca me ha negado. Ahora es ella quien toma el mando y me coloca de espaldas en la cama, dispone del contenido de aquel metalizado sobre y coloca el respectivo disfraz a mi abyecto apéndice magistralmente con su boquita, quedándose en aquella posición brindándome placer un par de minutos. Luego me monta a horcajadas por sobre mis caderas brindándome una espectacular visión de su espalda. Con una de sus piernas sosteniendo parcialmente su peso su mano guía mi minion a su íntima entrada y, una vez bien apuntado, desciende suave y lentamente sobre mí, hasta literalmente engullirme e iniciar su suave y ya conocido mortal vaivén. Mis manos instintivamente se aferran a sus nalgas y en cada ascenso las abro sólo por el morbo de ver su ojete y luego ayudo a descender sobre mí, queriendo "taladrarla" cada vez más profundo (¡como si pudiera!, pero ustedes entienden lo que pretendo decir), tantas veces en ese repetitivo ejercicio que veo la luz al final del túnel y me entrego a aquella magnificiente sensación de explotar en un millón de estrellas en el universo infinito y caer en aquella dulce sensación que sólo un maravilloso orgasmo permite vivir una y otra vez. Carlita, exhausta con el ejercicio, se desmonta de su cabalgadura y alcanza desde su velador toallas húmedas para retirar aquel burdo disfraz con su peligroso contenido y asear aquella insignificancia. Con mi respiración aún agitada la observo y le pregunto si ya estaremos en plazo "legal". Me responde que aún quedan algunos minutos pero, conociéndola, es seguro que ya alguien esté rondando el edificio esperando su propio turno de ingresar a este terrenal Olimpo de sólo una Diosa. Tomo la toalla y me dirijo a la ducha final. La disfruto. Me visto en el baño y regreso a la habitación. Carlita revisando su celular sobre la cama. Lo deja a un lado. Se levanta de ella (la cama) y me abraza una vez más. Nos volvemos a besar. Le digo "gracias por esta nueva maravillosa experiencia" y me acompaña a la puerta. Un último beso y me retiro. Una vez en la calle me recibe nuevamente el sofocante calor y contaminación de la urbe. Camino. Pienso. Sonrío en lo maravilloso que fue ganara la rifa de Carlita porque, claramente, fue un esperado reencuentro. Buenas noches. Anciano Novato "La EstoCada"

Re: Reglas y Sistemas de Sorteos - Rifas Buenas noches. Me parecen excelentes las modificaciones hechas a las normas que rigen el sistema de rifas pues, reconozcámoslo, es una deslealtad para con el portal el hacer esas sucias jugadas. Si se pide un número es porque se está dispuesto a participar y pagar el compromiso. ¿Dónde han visto tener la opción de vivir una hora con las musas que Lord pone a disposición para nosotros por exiguos $4.000-$5.000? Si no se tiene el suficiente dinero para pagar simplemente NO PARTICIPE. Nadie le pone una pistola al pecho para que pidan y pidan números y después éstos no sean pagados. ¡PERJUDICAN A TODOS LOS FOREROS! Le felicito, Lord, y siga la misma senda. Los únicos que ganarán serán los honestos y las Señoritas. Buenas noches.

Tabla de Reportes Nombre = LAYLA Edad = 20 años, si es que... Valor = 4 Arturos (yo: Cobro de Rifa) Nacionalidad = Chilena de tomo y lomo... y qué lomos... Ubicación = Metro Bellas Artes Lugar = Depto. Compartido con Amiguitas Conserje = Si hay conserje... Horario = Mediodía Recepción = Gentil, Sonriente, Afable Servicio: Empotamiento = 70%; soy débil con las que son jugadas... y ella lo es... Estatura = 1,65m aprox... no arrastra la bolsa del pan, lo importante Contextura = Delgada; Todo en su lugar y bien puesto Cara = Bonita; con frenillos pero no molestó en nada Nivel de Photoshop = 10%; borrado arte corporal Trato = Demasiado Cordial; me agradó mucho su sonrisa y disposición Besos = De Polola, Apasionada, Ricos Besitos Boobies = Medianas, Hermosas, Besables y Muy Sensibles Culito = Redondito, Albo, Besable Pussy = Sin olores; Perfectamente Rasurada Mamón = Sin Forrito, Delicada (por sus frenillos) Movimientos Pélvicos = Lentitos, Suaves e Inspiradores Anal = No Pregunté Ambiente = Ordenado, Limpio, Impecable Atención = Relajada, Dedicada Volverías = Sólo quiero que regrese para volver a visitarla. Relato... Me informa Lord que soy el feliz ganador de la rifa de varias musas y, viendo opciones, poco plazo y poca disponibilidad horaria, opté por LAYLA, una flaquita que en sus fotos me gustó mucho. Coordino con agencia para el día y hora con disponibilidad para mí (algo muy complejo desde un año atrás ya). Llego a la locación, enfrento una pareja de conserjes adustos y agrios en su trato. Ella llama al departamento, me anuncia, autorizan mi ingreso desde arriba. Golpea el teléfono al cortar la llamada y él me indica con un gesto de cabeza la dirección del acceso al edificio. Completamente "intimidado" traspongo la mampara de vidrio alcanzando los ascensores. Subo, llego al piso y enfrento la puerta. Voces y risas juveniles tras ella. Pulso el timbre. Silencio sepulcral. Se abre la puerta y ella deja ver su rostro tras la hoja. Me hace pasar bastante incómoda por ver quién será su visitante: un vejete, bastante panzón, alba barba y cabello cano. Le saludo. Me indica la habitación y me deja en ella. Luego regresa trayendo en sus manos una toalla y me lleva al baño para mi ducha de rigor. Una vez bien aseado nuevamente, regreso a la misma habitación dispuesto a esperarla. Me tiendo sobre la gran cama aún enfundado en la toalla. Tras algunos cortos minutos regresa ella enfundada en otra toalla. Tras su ingreso cierra la puerta del dormitorio con seguro, se libera de la toalla y me sorprende gratamente con su juvenil y esbelta figura, con algunos tatoos pero que no ocultaban ni menos opacaban su belleza natural. Le indico se tienda a mi costado y se lanza sobre la cama. Aún húmeda su piel y su cabello bastante mojado, la abrazo y la atraigo hacia mi pecho. Medio conversamos un par de palabras y, en una pausa en que nos miramos a los ojos casi tiernamente, nos besamos y nos perdimos. Su cálida boca y mis fríos labios se mezclan en aquel beso, jugueteando con nuestras lenguas en la boca del otro, con dulzura, con pasión, con ternura, con entrega. Mis manos recorrían su húmeda y fría espalda mientras ella sólo me abrazaba. Nuestras bocas no se permitieron respiro. Ambos nos entregamos frenéticamente a aquel ya excitante beso. Me inclino sobre ella sin interrumpir aquel ya maravilloso y encandilante beso. Beso sus mejillas, su frente, sus ojos, su cuello, bajo a sus pechos y uno a uno, con delicadeza pero con pasión, los recorro con mi boca en toda su forma hasta alcanzar su areola y engullir su ya erecto pezón. En ambos casos el contacto de mi boca y el jugueteo de mi lengua con sus pezones provocaron golpes eléctricos en la espina de LAYLA pues su espalda reaccionaba arqueándose de gozo. Libero de mis besos sus pechos e inicio mi ansiado descenso por su vientre en dirección a su flor, ya húmeda y dilatada. Sintiendo sus arqueos vertebrales con cada avance, llego a la zona pero me pierdo en sus firmes muslos de piel besada por el sol. Recorre mi boca aquella parte interior y sensible de sus muslos. Levanto una de sus piernas y mordisqueo el inicio de su nalga. Lambo fugazmente aquel anillo primoroso y me cambio de muslo. Repito la misma operación: le levanto su muslo y mordisqueo su inicio de aquella carnosa nalga. Mi lengua se pierde un instante en aquel ojete y asciendo hacia su vulva, esta vez recorriendo con mi lengua y mi boca solamente sus labios mayores, su Monte de Venus y volviendo a los labios mayores. Ya percibía su natural humedad pero me contuve. Seguía recorriendo aquellos labios, luego los menores, hasta que por fin besé sutilmente su clítoris. Su respuesta corpórea me fue más que suficiente para iniciar mi completo recorrido por aquella anhelada fisura milagrosa. De cuando en cuando LAYLA se erguía para observar mi "mirada del cocodrilo", pero yo estaba preocupado más de brindarle algo de placer y de libar sus néctares naturales que prodigaba en mi boca. Tanto fue mi afán y mi dedicación que obtuve mi propia recompensa: un intenso pequeño orgasmo mientras ella apretaba mi cara con sus manos contra su intimidad mientras yo insistía en mi beso. Vino su relajo. Me tiendo sobre ella (sin que ella cargue mi peso), le observo agradecido mientras ella disfruta sus últimas sensaciones oculta tras sus ojos cerrados. Vuelvo a besar sus pechos. Beso su boca una vez más. LAYLA extiende su mano y extrae un disfraz de aquel sobre plateado. Lo coloca con algo de ayuda de mi parte y me monto sobre ella en misionero. ¡Qué maravillosa y prieta intimidad! LAYLA, emocionada con mi apéndice dentro de ella, arquea sus caderas iniciando un pequeño vaivén. Le observo. Sus ojos cerrados me impiden verme reflejado en ella, pero sus expresiones, su respiración, fueron el suficiente aliciente para mí y mis embates hasta que, luego de cortos minutos, explota mi simiente en aquel disfraz de hule transparente dentro de ella, aferrándome con desesperación a sus nalgas y recorriendo su cuello con mis últimos besos. Se aquietan nuestras respiraciones. Le beso una vez más y observo su limpia mirada. Ya he completado mi tiempo y deberé marchar. Beso una vez más sus tiernas y candentes boobies, beso su boca por última vez y me retiro a la ducha nuevamente. Cuando salgo del baño y me despido de ella, me acompaña a la puerta. Un último beso, una última mirada y un sincero "gracias" tanto por su tiempo como por su dedicación, diciéndole mentalmente "no cambies nunca ni nos abandones, LAYLA, Mi Jugada y Generosa Señorita...". Buenas noches. ANCIANO NOVATO Layla, Comentarios http://www.laestocada.cl/upload_files/utilidades/chicas/2518/2518_2.jpg

Tabla de Reportes Nombre = FRAN Edad = Más de 20, pero con una experiencia ¡uf! Valor = Cobro Rifa 521 (4 arturos de incógnito) Nacionalidad = Chilenísima Ubicación = Metro UdeCh Lugar = Depto. Propio, Compartido con Amiguita. Conserje = Sí, hay conserje... mejor así... Horario = 33ºC, 16:00 horas Recepción = Siempre muy atenta, muy Amorosa Servicio: Empotamiento = 90% Empotado; me es fascinante ella Estatura = 1,60m al ojímetro Contextura = Delgada, bien formadita, tiene lo suyo y lo explota muy bien Cara = Bonita, Simpática Nivel de Photoshop = 0% de retoque, es ella todo el rato Trato = Muy Amoroso y atenta siempre, me enamora con su dedicación Besos = Los Mejores: de Polola y Amante Ardiente Boobies = Pequeñas pero dulcemente fascinantes y sensibles... Culito = Redondito, Paradito, Rico para morderlo... Pussy = Sin olores, Recortada, un Manjarsh... Mamón = Sin Forrito, Garganta Profunda, su obsesión... Movimientos Pélvicos = Batidora, muy buenas caderas... Anal = Con cobro Adicional pero me dejó sequito, así que no lo intenté (pero es una maravilla) Ambiente = Ordenado, limpio, fresco... Atención = Muy Relajada, 100% dedicada a su visitante... Volverías = Mmm... ¡TODO EL RAAATO! Relato... Una vez confirmado que había sido el feliz ganador de este suerteo, contacto y coordino con este angelito sexy que es FRAN. Ella muy amable me da las opciones de horarios y, llegando a mutuo acuerdo, voy a aquel cielo el Día de los Santos Inocentes. Paso el bloqueo inicial del conserje, registra, me anuncia, me autorizan, ascensor al séptimo cielo, pulso timbre, espero, espero, espero, y se siente el "¡clack!" de la puerta. Ésta se abre, ingreso, se cierra la puerta al trasponer el umbral y ahí está ella, sonriente, simpática, alegre. Termina de cerrar la puerta, nos abrazamos y me besa como sólo ella lo hace. Me lleva tiernamente a la habitación. Le entrego una nimiedad de obsequio que, al verlo, dijo lo llevaría a su casa para allá colocarlo en un rinconcito muy especial y disfrutarlo. Me pregunta si me ducharé y, ante mi cara sudorosa y agotado, me cede una toalla limpia y seca e ingreso al baño. Me aseo prolijamente mi apéndice (aunque venía duchado de casa, sólo con el viaje y para evitar sorpresas desagradables, me aseé nuevamente) y disfruto un par de minutos extras de aquella reconfortante agua fría... total FRAN con sólo tocarme hace resucitar mi muerto en vida... jojojojojo... Regreso a la habitación desnudo. FRAN, siempre sonriente, me abraza, me besa profundamente y me pide que me recueste pues me va a relajar ya que andaba con los nervios de punta (¿no les dije que con sólo tocarme resucita mi muerto... jojojojo). Me tiendo. Vuelve a asear a mi minion (sólo precaución de ella) y lo engulle suave, despacio, profundamente, e inicia un oral tan, pero tan exquisito y dedicado que a ratos le observaba y veía cómo lo engullía profundamente, lo salivaba, lo masturbaba un poco y lo volvía a engullir... yo me dejaba hacer, cerraba mis ojos y la sentía en su dedicación, en su entrega y preocupación por hacerme sentir grato. A tal punto fue mi relajo, mi entrega a ella y su manera de brindarme placer que en un par de minutos más sentí cómo el cielo se habría desde mi interior y explotaba sublime y súbitamente en su boquita, absorbiendo y engullendo ella toda mi simiente y dejando seco mi minion, lustroso, relajando todo mi ser. Después de esta maravillosa americana, sube, nos besamos, le abrazo, conversamos unos cuántos minutos cuando, sin decir agua va, vuelve a besarme profundamente mientras su delicada manita acariciaba nuevamente mi intimidad, logrando lentamente volver a la vida a mi indigno apéndice. Cuando se cercioró que nuevamente mi órgano estaba como para hacerlo trabajar, lo enfunda magistralmente con un especial beso, me monta en mis caderas a horcajadas y dándome la espalda, con su delicada manita lo guía a la entrada de su vulva, lo engulle ahora con su cálida y húmeda vagina e inicia un fenomenal vaivén de caderas que me tuvo muy por las cuerdas. ¡Qué movimientos! ¡Qué manera de mover aquellas caderas! ¡Qué atractivo y sensual trasero el que, a cada arremetida, me permitía observar aquel maravilloso ojete que algún par de ocasiones anteriores ya había disfrutado! ¡Qué fenomenal espectáculo! Antes que me derramara en ella por segunda vez, se retira, se voltea ahora de frente a mí, se vuelve a montar e inicia sus vaivenes gimiendo dulcemente en mi oído sin dejar su baile sobre mis caderas. En un arrebato de locura en aquel fragor, le abrazo y me aferro a sus nalgas, las separo y guío sus caderas hacia mi verga profundamente. Volví a abrazarla y bruscamente giramos ambos sobre la cama quedando ella bajo el peso de mi cuerpo y continuamos en aquel misionero, entrando y saliendo maravillosamente de ella. Gemía, me apretaba, yo le abrazaba y, en una media pausa, le pido la "Doggy Style", vuelvo a entrar en ella y reinicio mis "ataques" suavemente, tiernamente hasta que, el sólo verla en aquella posición y sus cimbreantes caderas con aquellas nalgas de ensueño a mi merced, pierdo toda compostura, me aferro fuertemente a sus caderas e inicio un frenético entra/sale casi salvaje donde, tanto ella gemía como lo hacía yo, en unos instantes llegó mi nuevo momento del Big Bang y vuelvo a entregar mi simiente en el preservativo dentro de aquella maravillosa y cálida intimidad. Los estertores post clímax se apoderaron de mi ser mientras ella se tendía exhausta sobre la cama. A su costado y completamente agotado me tiendo también, mi corazón acelerado palpitaba tratando de regular respiración y ritmo cardiaco... en una pausa reiniciamos la conversación mientras le acariciaba y besaba sus tiernos y delicados pechitos. Miro el reloj y ¡ya estábamos pasados en la hora! Rápidamente me yergo sobre la cama y me dirijo al baño a darme la segunda ducha mientras escuchaba a FRAN risueñamente expresar "¡siempre contigo me paso! Contigo el tiempo vuela...", me río... ducho rápidamente, me visto, le beso profundamente una vez más y le pido me eche del departamento porque si no nunca me marcharé... jojojojojo... Me acompaña a la puerta, un último beso, nos despedimos deseándonos felices fiestas de fin de año y salgo caminando entre nubes... decido bajar por la escala... llego al sofocante calor, a la ruidosa ciudad y vuelvo a recordar, una vez más, a esta magnífica mujer que es FRAN, un Dulce Ángel del Deseo... Buenas tardes. Anciano Novato "La EstoCada" Fran, Comentarios http://www.laestocada.cl/upload_files/utilidades/chicas/1972/1972_1.jpg