Juan Velasco

Felatio de Maite, para morirse Es esa misma. Justo ayer fui. Su cunnilinguis es memorable. Profundo y con un final en el que no deja rastro seminal alguno, gracias a una boca diestra y avezada. Terminé como cuatro veces y en dos con un "lavado-secado" bucal con el que ya quisieran contar las mejores cadenas lavacarros. Maite es muy simpática. Además de dulce y con buena predisposición. La idea se la puede ir estableciendo solo con llamarla. Es relativamente bonita y aunque no cuenta con un cuerpo alucinante, sus proporciones activan la libido. Pero tiene una rara mezcla de ganas/acogimiento, de esas que arrastran a recordarla. Y en última instancia a volver. La encontré muy parecida -en términos generales- a Carrie, de los datos under. Solo que en pleno Holley con Suecia y con un poco más de dulzura. Pide 60 pero pude llegar a 50 mil. Como para no perderla como dato fijo. Si es que en algún momento se aburren de Tammys o terminan sus promociones (jeje). J

Master: En una de esas nos topamos con la under con doctorado promovida por monsieur Planetario!!! (jeje). S y P han sido súper buenas experiencias. El tema con las brazucas y el idioma no deja de ser. Como que se rompe una barrera y las cosas fluyen. En mi caso con P, fluyeron demasiado bien. Increíble recordar cosas que hace tiempo viví (en Brasil, el verano de 1998). La gente de allá es lo máximo. Y además como que te abordan de manera distinta cuando hay una especie de lazo de identidad. Bueno, mi recomendación con Tamys es que comiencen a tomar clases intensivas. O al menos lleven fotos (reales o trucadas) de ustedes en alguna de las playas o ciudades de ese país-continente. Bailan mejor el samba encima de uno (jaja). Comprobado! Boa sorte galera!!! J

Gente: No me hubiera atrevido a iniciar tema si la susodicha no hubiese valido la pena. Como quería visitar Tamys antes de que terminara la promoción de febrero, justo el 29 fui. Ahí estaba. No me acuerdo con qué nombre la motearon, pero por las fotos creo que es Pampita. Partí con ventaja porque hablo portugués. Ella, que llevaba apenas un día, era súper conversadora y agradable. Además de bonita, descubrí que está estudiando una maestría en gestión ambiental. Hablamos de música, carnaval, playas y un sinnúmero de lugares comunes que me retrotrajeron a un pasado que es siempre mejor. Increíble cómo un encuentro así puede provocar aquellas saudades. Del sexo ni les hablo. Excelente. Con las piernas que tiene parecía que estuviera en combate con una jugadora de fútbol o con una cangreja. A cada una de las incursiones (que si mal no recuerdo sumaron 3) terminábamos tirados en la cama viendo cómo entraba el sol por los entresijos de la persiana. Se rió y me abrazo cuando le dije que solo faltaba la playa para refrescarse, pero que parecía como si estuviéramos en nuestra propia, con el sudor bañándonos luego de la acción. Ella no es mi tipo físicamente hablando. Pero es una grazinha. Espontánea, inteligente y con la cabeza y el deseo ubicados donde corresponde. Altamente recomendable. Saludos, J

También hay otros datos: Uno que siempre consulto es www.platynum.com.ar tiene una buena cantidad de escorts y las fotos son menos "retocadas" que en areavip. Creo que entre platynum y areavip se encuentra el mejor grupo de escorts. Concuerdo que la cifra debe andar entre 250 y 300 pesos, pero generalmente aumentan un poco con el acento. Siempre es posible negociar. Saludos, J

Mister galáctico: Se le agradece una vez más tanta consideración para con los foreros con estos datos under. Qué bestia, cuánto potencial en Carrie. La mezcla juventud-pasión-espontaneidad lo deja a uno marcando ocupado. O, en mi caso, pensando en Nabokov y las razones por las que escribió Lolita. Y es que no pude dejar de pensar en la sensación de encontrar a una chica joven pero con aire de ser aún más joven. Tipo adolescente de lascivia desarrollada y químicamente pura. Cuando la vi sentada frente al lugar de encuentro, temí estar infringiendo algún tipo de ley. Recordé también al profe de la primera historia de “Radio Corazón”. Y me sentí un poco extraño, atemorizado. No era ella, que se mostró simpática y acogedora desde el inicio. Era yo, la plaza atestada de gentes, y la memoria de Lolita y tantas circunstancias trasgresoras. Pero la conversación se inició y desarrolló como entre dos adultos con buena predisposición. Lo que siguió, ídem. Es más, debo decir que pese a su corto trajín, C sabe a lo que va y se entrega en ese viaje con una predisposición elocuente. Casi de turista avezado. En el juego de cuerpos observa, acude, se emociona. Y cómo. Pierdes la noción de en qué momento se trastocan los papeles y nadie sabe quién “visita” a quién. Los roles se acabaron y parece una historia de amantes que están a punto de caramelo. Uno más maduro y la otra, una lolita. Así, en minúscula. La novela y Nabokov volvieron de nuevo a partir de los gemidos de C. Eran agudos, casi infanto-juveniles. Otra vez me sentí extraño. ¿Habrán sido así las experiencias del protagonista de la novela o del propio Nabokov? ¿Era ese un punto en común, misterioso y auditivo? ¿Cómo diferenciar el gozo del placer con el dolor? Pensé que preguntando. “Dale, me gusta que me des así” fue todo lo que obtuve como respuesta. Y como el cuerpo que estaba estocando te comunicaba que sí, que lo que su boca decía era cierto, pues ni modo, a seguir con esta versión remozada de Lolita se había dicho. Cumplí con mi parte del juego. Carrie también. Era un juego curioso porque se completó en dos tandas extremadamente sudadas de las que nos libramos con un par de duchas necesarias y reparadoras. En seco, después de todo el cansancio posterior al encuentro, contemplo su figura y me doy cuenta que solo le falta el jumper y unos cuantos cuadernos para completar el cuadro de colegiala. En eso me encuentro con una tirita tejida que cubre algunas de las hebras de su cabello. Como si se tratara de una manija que abre su cortinaje rubio y lacio. Y también su corazón. Se lo digo. Ella se ríe con unos dientes imprecisos. Camino a casa, no puedo dejar de pensar en Nabokov y en lo bueno, en lo realmente bueno que es encontrar a chicas así. Estratosféricos agradecimientos de mi parte, J

No maestro. Solo es el ojo clínico. Busqué el nombre, no lo encontré, pero vi el rostro enmascarado relativamente familiar. Y voilá! Ojalá le vaya bien en su nueva reencarnación. Me (nos) cuenta sus novedades con esta camaleónica (que bien puesto el término"cama" y "leónica", jajaja, lo que hace lo que llaman la re-escritura) belleza. Arrivederci, J

Aviso de utilidad pública Como dice el godfella Godfather, Melany actualizó las fotos y, de paso, el nombre. Ahora se llama Candy en Relax. Maestro, qué cuerazo. Con esa pinta de gatita bondage, da para pensar que la triple doble, puede ser una triple triple (si se incluye el bondage y otras cosas que generalmente vienen anexas). Sl2, J

El jueves de la semana pasada. A la hora del almuerzo. Cambié el tutro y pechuga por .... Bueno, por la misma cosa. "Y qué pasó con el * ???" Qué es eso?. Maestro, asterisco sobre asterisco. En todo caso, la combinación triple con triple, triplemente recomendable. Repita nomás. Yo también estaré de reincidente. J

Gente: Yo también visité a Melany. Qué puedo decir. Un verdadero volcán en erupción, con cuerpo montañoso y calentura magmática. Es de las pocas mujeres que en persona se ve mejor que en las fotos. Y es súper simpática. Y cobra (primero les va a pedir 60 y luego negocian por 50) lo justo. Toda una triple B. Y además con triple X. Tiene (y le gusta) mirar pornografía. De eso me vine a enterar después de la primera función. La segunda, voyeurismo de por medio, le metió candela a la partida y terminó más que bien. Diría que hasta mejor que la primera. Pero lo anecdótico no acaba (literalmente, jeje) ahí. Terminando la segunda tanda nos fuimos a duchar. Las imágenes de la peli seguían dándonos vuelta y, como el movie seguía activado, se escuchaba la perfomance tan clara como si la estuvieran filmando a nuestro lado. A veces se necesita solo escuchar para reactivarse. Y eso nos ocurrió al mismo tiempo. En el lavadero me avalancé como gato en celo, sobre su cuello y derriére y empecé a llevar a la realidad tanto sonido placentero que se escuchaba en derredor. Fue una escena erótica a mil. Los dos nos veíamos en el espejo del baño. Eran nuestras caras con gemidos de gozo, nuestros movimientos pélvicos que se transmitían como latigazos sobre nuestros cuellos y hombros. Nunca hubiera pensado que el lavadero de un baño, peor un simple espejo, podía haber reflejado un encuentro tan intensamente sensual. Y así nos fuimos juntos por tercera vez. Raya para la suma: Triple B. Triple X. Habría que ser triplemente idiota para no ir. J